Julio
Anguita se desmarca del Frente Social que preconiza Pablo Iglesias,
apostando por su formación. No es una postura nueva en él. Ya durante su
etapa cordobesa (en la que fue bautizado como "Califa" por la prensa) y
en la del PC, vendió todo el pescado. Ahora, este hijo de un
guardia civil, maestro, y levitante en la vejez, se ha transformado en
una suerte de predicador profético que
está más allá de todos los frentes posibles; aunque muy cerca del grupo
de pertenencia: IU. Un partido obsesionado por la puntillosidad
parlamentaria desarrollada durante la Transición. Viene a ser la
izquierda del PSOE; insuficiente además en términos de voto, y casi nula
en los de movilización social.
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