El
verbo depredar se ha convertido en el principio que guía las acciones de
la corona, el gobierno y su corte aliada de poderosos caballeros del
dinero público y privado, saqueado a espuertas en España. Pretenden
mandar sobre un país de obedientes resignados a comer migajas del
festín, y millones de mendigos asfixiados en la mugre material de la
miseria, sin capacidad de reacción. El
empeño de quebrar el espinazo social viene rindiendo sus frutos,
mientras todos ellos, encumbrados genocidas y ladrones, prosiguen su
escalada, ya algo accidentada, sin que el grande escarmiento arrasando
el verbo se avizore en el horizonte. Sin embargo, la Historia, es lo más
parecido a una caja de sorpresas. Si de momento se invoca el doble
temor a la violencia social y la Revolución Francesa, es porque quizá,
algo muy digno de acontecer se esté larvando con cierta precipitación.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario