Sobre las 9 de la mañana me llega un nuevo ataque de Jiménez Losantos a la convivencia universal. Esta vez, enredado en la comparación de personajes públicos que aborrece con ejemplares primitivos, arremetió contra los maoríes, individuos que según el dicente aullan como los gorilas. Familiarizado con los aullidos de King Kong aunque sin un ápice de su humanidad, el as de la COPE emitió los correspondientes, ante la complacencia de José Raga, Luís Herrero y el "filósofo" Albiac.
En un medio del siglo XXI y en este país de la Europa Occidental desarrollada, la miniatura leninista de la extrema derecha y sus obedientes laderos se mofan de los nativos neozelandeses, fundadores de orgullosa civilización que sobrevivió a colonizaciones y masacres. Entre sus previas imitaciones rebosantes de desprecio, se cuentan, entre otros: "moros", argentinos, cubanos de Fidel, venezolanos de Chávez, vascos y catalanes. Todos perteneceríamos, según ocurrencias del momento, a una escala zoológica inferior.
A tal efecto, en cada reflexión de este gran improvisador de dislates y bufón de la Corte, brotan de su privilegiada garganta los correspondientes sonidos y onomatopeyas.
Es bien conocido que este protégée de Esperanza Aguirre constituye uno de los principales libretistas de los señores Rajoy, Zaplana y Acebes en los últimos cuatro años. No es que se los escriba. De la minucia se encargan otros meritorios. Él los inspira, vigilándoles a todos y cada uno con celo de regidor, mientras en Libertad Digital TV el desvergonzado Albiac, de lúgubre voz e invariable tremendismo reaccionario, intenta reeducar izquierdistas semiarrepentidos (él mismo lo es del todo sin haber mediado autocrítica de ninguna clase) para encauzarlos en el sendero ciudadano...del racismo, el desprecio por las etnias y el subsiguiente odio por los inmigrantes.
No es que este pseudo pensador, rapado al cero desde su conversión -como si estuviera purgando una condena- lo manifieste en pantalla. Lo convalida mediante su intervención en los vehículos que el otro promueve y entre otros, financia el encumbrado tertuliano, señor Recarte.
Detrás, Rouco Varela, García-Gasco y Cañizares imparten sus bendiciones al personal.
Pronto se harán con el control absoluto de la Conferencia Episcopal, rezando al Señor para que el anhelado triunfo del Partido de Rajoy y Aznar -servidores del gran capital y la optimización del plusvalor- el día 9, redondee la jugada del jaque mate rotundo a la sensatez pública y el progreso social del pueblo español.
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