La campaña contra el ex jefe de Urgencias del Hospital Severo Ochoa por "asesinar" a varios pacientes terminales se ha saldado con un juicio y su absolución; rechazada por estos sectores; que siguen responsabilizándole de las muertes.
La tácita desobediencia a un fallo en firme de la judicatura reitera el manifestado (de hecho) por el diario El Mundo y las foclóricas, ante la otra sentencia del CGPJ condenando a los responsables de la masacre del 11M.
Entre tanto, prosigue la feroz carga contra la liberalización del aborto que promueven los sectores de izquierda y el gobierno socialista.
En nuevo bando, la Conferencia Episcopal llama a no votar a quienes hayan negociado con el terrorismo.
Esta es una grosera intromisión en asuntos de Estado que no competen a los obispos, sino a los votantes. Creo que ya va siendo hora de revisar los viejos pactos de este Estado aconfesional con la Iglesia, camino a laicizarlo por completo.
En el apartado de las torpezas destaca el anuncio de Oriol Pujol, en el sentido de blindar la inmersión lingüística, como respuesta a las críticas que viene realizando al respecto el PP.
Ante el lamentable estado de la educación en Catalunya, no cabe blindaje alguno, sino planes educativos que mejoren sustancialmente los actuales. Hoy en un IES leridano una profesora de Historia y Filosofía, me decía.
"Nos cambian una hora de Filosfía por otra de Educación Ciudadana. Me pregunto qué harán el mes que viene...
¿Por qué razón no consensúan planes de estudios que duren diez años? No es que me moleste la nueva asignatura. Pero estas brusquedades, ante las que una debe reprogramarse a gran velocidad, crean una sensación de precariedad enorme entre nosotros. Si a ellas le sumas el cambio constante de plantilla (aquí llegaron este curso 18 profesores interinos sobre un total de 65), el cuadro planificador de cara al claustro de profesores empeora".
Este escenario inestable se proyecta a toda Catalunya, profundizando un caos educacional que no ofrece mejores perspectivas al bajo nivel actual. Es lo que tendrían que asimilar de una vez por todas Ernest Maragall, Joan Manel Trasserras, y en especial Carme Chacón, que encabeza las listas locales del PSC, revelando ahora coincidencias con posiciones ultranacionalistas, y por lo tanto contrarias al bilingüismo.
Otra torpeza, que lesiona esta vez la confianza en quienes nos gobiernan, la perpetró el Ministro de Justicia, Fernández Bermejo, al señalar que ZP autorizó contactos con ETA tras el T4 de Barajas, "para saber a qué atenernos".
Si no les bastaban dos nuevos cadáveres servidos por la banda terrorista para concluir que la tregua estaba rota y la instancia gubernamental había fracasado ¿qué esperaban para reaccionar admitiéndolo?
¿Tal vez otro más brutal y luctuoso?...
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