LA PROFESORA Y SU AVENTAJADO EMPOLLÓN
En su
charada con Santamaría, Merkel acaba de prender una dudosa medalla en
el pecho de Rajoy, al destacarlo como el alumno de su magisterio más
aventajado de la Eurozona.
Viene a constituír el ejemplo del
"empollón" de la clase, chivato vocacional, y enemigo de la fraternidad
propia del intercambio humano en el aprendizaje constructivo.
Para nada incluyó en la torticera ponderación
los clamorosos asuntos sucios del partido de Gobierno y el Ejecutivo
mismo, con ministros cuestionados por su incompetencia y capacidad
destructiva en sus áreas respectivas.
A Merkel tan sólo le
interesa la sumisión, y que paguemos las deudas que sus bancos y los
nuestros pactaron alegremente en el pasado reciente, cargándolos a
nuestros menguados tributos según precepto constitucional.
La receta
alemana que tanto le complace al subordinado Gobierno local, consiste
en invertir el concepto de "adecuar los mercados a la Democracia", por
el de "adecuar la Democracia a los mercados", con los calamitosos
resultados del presente para los derechos democráticos y sus previas
conquistas, a lo largo de muchos años.
La pavorosa degradación
social griega marca el futuro generalizado de esta política, que abrazan
con unción el señor Rajoy y sus huestes, prometiéndonos un mundo feliz
en medio de la mayor devastación. Eso sí, acolchadas las corruptas
señorías en pagas espléndidas, legales o no, mientras el paro y la
miseria crecen y los salarios bajan, reproduciendo el tan admirado
modelo alemán, desde recursos materiales muy inferiores.
El diseño neoliberal de las grandes finanzas impone sus leyes de explotación y sometimiento.
Todo esto se perpetra en España y Europa con el expreso acuerdo de la
derecha y el centro parlamentarios. Así lo revela el pliego conjunto que
este débil Ejecutivo obtuvo como respaldo a una farsa limosnera de
empleo juvenil, Pymes y etc.
Unos pocos euros de gracia que, no obstante, brindan algo de oxígeno a la inevitable asfixia de su gestión.
Habrá sin embargo que apuntar el éxito momentáneo de la prestidigitación promovida por los sectores aludidos.
Ellos son mayoría aún, aquí y en Europa.
Lo peor del caso radica en la presente debilidad de Francia frente a
Alemania. Hollande, que pintaba fiero y esperanzador ante la Canciller
de hielo, una asexuada provinciana criada en la RDA, repite las fintas que condujeron al vasallaje de Francia con
relación a su antigua nación rival en los años ´30.
La razón nace de
sus clases acomodadas, maleables y cobardes a la hora de conservar
privilegios, en detrimento de los asalariados y campesinos modestos.
Lo nuestro es mucho peor, a causa de la mayor vulnerabilidad productiva
y social. A ello se suman privilegios oligárquicos heredados del
franquismo. De ahí que nuestros malos gobernantes reciban medallas, junto
a limosnas que no han de servirnos para paliar o cambiar nada, como no
sea a peor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario