Lo bello es noble, digno y eterno si viaja al corazón del hombre

lunes, 23 de febrero de 2015

SALIR DE LA RATONERA


El prestamista y su regateador: Schauble y Varoufakis


La ilusión de un David heleno que vencería al Goliat teutón comienza a derrumbarse. No hay peor noticia que ésta, no solo para los griegos, sino para muchos españoles y los avances políticos de "Podemos". Nuevamente, la hiena filonazi, el grotesco malvado en silla de ruedas y los tres hombres de negro, personajes propios de la más tenebrosa novela negra, dejan al enviado económico de un gobierno que pintaba justiciero a la altura de un Samaras cualquiera. De confirmarse esta tendencia, Syriza reiterará el destino del PASOK. 

Mis previos comentarios señalaban la imposibilidad de hallar una vía de escape desde el interior de la ratonera europea, con su brutal ajuste fiscal, nuevos intereses gravando deudas impagables y la maldita moneda asimétrica, lastrando el porvenir de los territorios continentales del sur. La única salida posible es abandonar la trampa y sus perversos mecanismos en pos de otros horizontes. No solo Grecia atravesaría un período de nuevos y necesarios sacrificios, mucho más justificables. Su abandono comunitario traería nefastas consecuencias para el IV Reich, el euro y una estrategia asfixiante de dominación, pródiga en crueldad social y pérdida del equilibrio integrador de la equidad en muchos países. 

Los griegos y sus actuales líderes están cayendo en la celada del paneuropeísmo. No ven porvenir alguno fuera de la ratonera, cuando la realidad vuelve a señalar valores inversos a esta estimación. Un territorio de once millones de almas puede ensayar acuerdos bilaterales con China, Rusia, la India y América Latina, revisando a fondo las deudas pendientes con los bancos alemanes, franceses y españoles, mientras recupera su maltrecha economía reactivando el mercado interior. De no escoger esta alternativa, el país está condenado a no emerger del cubo de basura al que lo relegan los vampiros continentales, perdiendo su identidad nacional por un largo período. 
Por otro lado, no creo que los parientes de Hitler, acostumbrados a imponer a costes suicidas su voluntad, aflojen las riendas, no solo por Grecia. España, Portugal, Irlanda e Italia demandarían igual trato, y todo el tinglado estratégico que han venido montando desde la unificación territorial se les iría al garete. Alemania crece gracias a esta política depredadora. En vez de armamento, utilizó préstamos ajustados a una vieja estrategia comunitaria, aviesamente actualizada.Su prosperidad usuraria comporta la ruina de los demás, y esto no tiene vuelta de hoja. Con otras armas, Merkel y Schauble deben ser derrotados igual que Hitler, muerto por mano propia en su bunker berlinés, ante el fracaso de un pretendido imperio que los alemanes se empecinan en restaurar.

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