LA TRANSPARENCIA, MADRE DE TODAS LAS BATALLAS

Desde tiempo atrás creí que Monedero debía irse de Podemos. El tamaño de su arrogancia es considerablemente dañino. A mí me saqueó fotos del Blog, reflexiones y análisis.Paró de hacerlo ante mis embestidas en Twitter, pero continuó con sus trampas en otras áreas. Ahora lo sostiene el incipiente aparato partidario y, sobre todo, su encumbrado número uno, a costa de perder prestigio y votantes. La sucia maniobra de Montoro denunciándole en público(otra de sus memorables infamias), cuando hace la vista gorda con grandes chorizos(vía amnistía fiscal) de su partido y aledaños, es de tamaño muy superior, en proporción y daños materiales. Después de todo, Monedero pagó la multa haciendo la declaración complementaria. Eso no le exime de su visible tara moral. Con Tania Sánchez ocurre algo parecido, pese a que sus enemigos, los dos pájaros de IU, estén complicados en el affaire Bankia y sean peores que ella. Sordo y ciego, Iglesias ampara a su amigo del alma y a su actual pareja, permitiendo que las bazofias del PP y el PSOE hagan su agosto mermándole sufragios. Antepone el interés personal al de su formación, empleando el monolitismo hispánico que ha caracterizado a los dos grandes partidos desde hace treinta y ocho largos años. Ciudadanos y, en especial UPyD proceden exactamente igual. Rosa Díez, cotorra de la anticorrupción, y enemiga de los derechos de las nacionalidades a resolver el tipo de vínculo que desean con España, supera ampliamente el mero personalismo, desembocando en una reacción pura y dura, muy cercana a Rajoy y su partido. 

Por que, justamente, la corrupción empieza por ese monolitismo fóbico, intolerable en términos democráticos. El de Rivera es menor, aunque igualmente, su formación dependa de un liderazgo que niega a los catalanes el derecho a escoger su destino.

La falta de formación política y cultural, demostrada con creces durante la horrenda y dañina gestión del PP, absolutamente amoral, no fue superada por el resto en el enfoque instrumental de la política, pese a la emergencia popular y el brío juvenil demostrado en las calles, cuya punta de iceberg fue el bautizo electoral de Podemos y sus cinco eurodiputados, provocando una permanente crisis del Estado, monárquico y corrupto. 

Como respuesta, El PP, el PSOE y los medios orales, visuales e impresos, en poder de la derecha, desarrollan un violento macartismo verbal, respaldando decretos represivos a espuertas. La victoria electoral de Syriza en Grecia multiplica esta reacción del establishment hispano y europeo, en defensa del paneuropeísmo criminal y la hegemonía del IV Reich, con gobiernos vasallos como los de España, Grecia y Portugal. La caza y captura de votos del centro e izquierda es necesaria, perentoria e ineludible. También el rechazo de la monumental ola macartista. Para ello,las credenciales de los líderes que aspiren a desplazar por el flanco social izquierdo a este sistema corrupto, en plena descomposición desde hace mucho tiempo, deben ser transparentes. Es una necesidad perentoria ante la cercanía de las municipales y la corta distancia de meses que nos separa de las generales. Debiera tomar nota las gentes de Podemos e IU, formaciones especialmente vigiladas con celo por el gobierno y sus aliados, extirpando cualquier síntoma de personalismo y corrupción personal. En ambas y otras, muy cercanas a estas posiciones, sus cúpulas deben curarse en salud, depurando sus filas. De no ser así, la derrota de los principios, aunque ganen elecciones, precederá a una nueva y gran frustración.