UN IMPASSE PARCIALMENTE PRODUCTIVO .

Sumando los votos de Podemos, las confluencias e Izquierda Unida, la izquierda reivindicativa supera en un millón de votos al decadente PSOE. En política, la tradición de años no vale de nada ante el presente, y menos la cifra imaginaria que tararea esta agrupación de fósiles giratorios, financiada desde 1978 por la socialdemocracia alemana. Ahora desean, en forma no declarada aunque manifiesta, compartir migajas de poder con el PP. Ellos iniciaron los primeros recortes, señalando el camino a la barbarie de Rajoy, que tranquilo y leyendo"Marca", aguarda ejercer la continuidad de los destrozos,según órdenes de Bruselas & Berlín. Pedro Sánchez, típica criatura de aparato, no asoma el hocico para nada. Sabe que ser presidente excede su capacidad intelectual y moral, mientras mata el tiempo chapurreando idioteces con el fantasma de Rivera, oficioso anfitrión del PP. 

Si el ego de Iglesias, y sus baroncillos tamaño baño lo autorizan, las nuevas elecciones permitirán a la izquierda concentrar fuerzas.Pero de momento y conociendo el paño, Ada Colau y Mónica Oltra demarcan territorios propios en Catalunya y Valencia. Esta es la espléndida novedad que aporta este impasse de las formaciones burguesas, cada vez más desprestigiadas, a la hora de una próxima justa electoral.